Primero de todo quiero agradecer a esta maravillosa pareja que son Gabriela y Yeyo, los cuales llevan ya unos largos meses viajando en pareja, el poder colaborar con ellos.
Y por lo tanto poder escribir en su blog, que siempre es un placer, ya que compartiendo se aprende mucho. Por casualidades de la vida nos une una cierta similitud en nuestros nombres de web Caminos en el Mar y Caminito Amor que nos ha proporcionado alguna anécdota simpática. Y también el hecho de que ellos, al igual que nosotros, estamos viajando en pareja por el mundo.
Hoy esta casualidad se ha convertido en un cruce de caminos.
Índice
¿Quién soy y por qué te escribo sobre viajar en pareja?
Mi nombre es Adriana, soy la creadora del blog Caminos en el Mar.
Coach life y segunda capitana de nuestro velero Dama de Mar. Me gusta compartir mi experiencia ya que pienso que todo ello puede enriquecerte, hacerte pensar, tocarte alguna fibra. Mi pasión es el coaching y el mar.
Viajando en pareja en un barco te das cuenta de la importancia que tienen algunas cosas que en tierra pasan más desapercibidas. Que conste, que sean desapercibidas no quiere decir que no tengan su importancia. Todo al contrario, sobre todo si lo que quieres es tener relaciones felices de pareja.
Estoy notando, a través de las peticiones que recibo, que cada vez más personas quieren:
- cambios en su vida
- sentir que su vida está alineada con sus valores
- conocerse mejor
- hacer cambios que los transformen
Ayudo a estas personas a transformarse y a conseguir más claridad, más auto-confianza para encontrar su camino. Entre estos clientes hay algunos que quieren empezar una nueva vida más nómada y se preguntan cómo es vivir viajando en pareja, que cambia, como es.
La verdad, es que por mi trabajo como Coach reflexiono mucho sobre ello. Junto con mi marido tenemos grandes conversaciones sobre lo que vamos explorando y descubriendo.
Él me dice que no hay nada como tener un Coach al lado para aprender de uno mismo. Y yo le contesto que no hay nada como estar a su lado ;). ( Ser agradecido te proporciona momentos de felicidad y que mejor que serlo con tu pareja)
Lo que te puedo asegurar es que durante estas conversaciones, y durante el camino que estamos realizando, aprendemos mucho. Se aprende de uno mismo y de la propia relación. Y toda esta enseñanza que me proporciona mi experiencia la vuelco también en mis clientes para que se aprovechen de ella.
Es cierto que viajar en pareja es una experiencia muy especial , hay quien lo prefiere hacer solo. Nosotros estamos encantados de hacerlo de a dos y razones para hacerlo puedes encontrarlas en tu interior y también en este post que escribieron Gabriela y Yeyo.
Nosotros decidimos cambiar nuestro estilo de vida e irnos a vivir a nuestro velero hace un año, dejamos el piso, los trabajos de ejecutivo y nos pusimos a preparar esta maravillosa aventura.
Reformas, preparaciones, dejarlo todo cerrado y listo para levar anclas definitivamente este pasado septiembre. Pasé a mis clientes de coaching de offline a online, y nos quedamos con lo justo y necesario para iniciar esta aventura.
Navegando y viajando en pareja hemos vivido experiencias intensas.
Te destacaría lo mucho que estamos aprendiendo uno del otro y de nuestra relación. El aprendizaje es intenso si eres consciente de ello, lo verbalizas y lo integras en tu día. Aunque a veces dicen que en casa del herrero cuchillo de palo, procuramos que esto no pase en nuestro día a día y que todo aquello que yo puedo aportar como Coach quede reflejado luego en nuestra convivencia.
Vivir en un barco tiene unas características especiales, el espacio es reducido, apenas hay intimidad. Trabajamos dentro de él, además de navegar y viajar. Son 24 horas de convivencia que hay que saber gestionar.
Lo que me he dado cuenta es que este tipo de vida es una especie de amplificador de lo que nos podría pasar en tierra. Digamos que vivimos en concentración. En un barco, la experiencia de un año es como siete en tierra.
La comunicación viajando en pareja
Uno de los factores más importantes cuando viajas en pareja y cuando vives en tierra también, es como nos comunicamos. Como Coach, tengo la teoría muy interiorizada, y buena parte de la práctica. Aunque las circunstancias extremas me ponen a prueba constantemente.
Como comunicarse eficazmente
Para que la comunicación sea fluida y no interfiera en la buena relación, nosotros siempre estamos pendientes de lo que yo llamo de forma divertida los cuatro piratas destructores.
- El Desprecio o la Ironía, aunque a veces resulta divertido cuando eres espectador, no lo es tanto cuando tu eres la diana de estos dardos envenados. Hay quien la utiliza de recurso de defensa, empezando muchas veces una guerra dialéctica.
- La Crítica, encerrada a veces en frases del tipo «es para mejorar», encierra una queja que puede dañar la relación si no está bien expresada
- La reacción que suele aparecer en algunos casos es la Defensa, sales a contraatacar contra aquel que sientes que te hace daño.
- Y por último a veces nos defendemos y/o atacamos con el Silencio. Una actitud que puede ser mortal para la relación.
He visto clientes e incluso algunos amigos, que con la excusa de que «yo soy así», se comunican muy a menudo bajo uno de estos cuatro piratas destructores de la buena comunicación.
Y te confieso que nosotros tampoco nos libramos de ellos. Si te descuidas aparecen de forma sigilosa. Por ello hablamos mucho de como nos hace sentir y de que pasa cuando el pirata aparece.
La base para poderlos combatir son:
- el respeto mutuo
- conocerse profundamente a uno mismo
- la claridad en el momento de hablar y comunicarse.
Y siempre hay que estar atentos, no se puede bajar la guardia. Te puedo asegurar que con un buen trabajo de coaching introspectivo he ayudado a muchos clientes a mejorar sus relaciones.
A mi me gusta ver la relación de pareja igual que cuando navegas, tú puedes estar relajado por que hay mar plano y poco viento, aún en esas condiciones alguien tiene que estar vigilando. Puede aparecer cualquier cosa que ponga en peligro la navegación.
Pues lo mismo, con mimo y cariño hay que estar atentos y cuidarse. Las relaciones de amor son delicadas por eso hay que cuidar y cultivar los hábitos de las parejas felices.
Hablar de las emociones
Precisamente una de las cosas que más cuesta expresar son las emociones y saber como comunicarlas correctamente.Y a la misma vez son una parte esencial de la felicidad en la pareja.
Por desgracia no nos han enseñado a conocer y aceptar nuestras propias emociones y éstas aparecen cuando ellas quieren. Saberlas reconocer para poderlas gestionar es vital para las relaciones felices. Son la base de una buena convivencia.
Si además añadimos que tenemos tendencia a mirar hacia fuera en lugar de hacia dentro, la cosa se complica. Hablar de lo que uno siente sin dar la culpa al otro es tarea que requiere un cierto tiempo, conciencia y práctica.
El primer paso es reconocerse. Para ello el conocimiento de uno mismo es fundamental. Reconocerse si estás enfadado o decepcionado o irritado.
Pregúntate: ¿Qué es lo que hace que se activen estas emociones en tu interior? ¿Qué hay detrás de ello, qué creencias, barreras o miedos?
Es verdad, la teoría, es la teoría.
Y ahora ¿qué pasa cuando estás 24 horas juntos?, a veces en un espacio reducido y sin poder salir (tirarse por la borda no es una opción válida). Pues que la teoría tienes que llevarla a la práctica, hablar mucho con tu pareja desde la confianza y el respeto. Ser consciente del trabajo interior que has hecho y hacerlo un juego. Divertirse con ello.
Viajando en pareja son un equipo
Nosotros navegamos y viajamos de a dos. Dos ya es un equipo. No estás tú solo con tus circunstancias. A nosotros nos gusta enfocarnos en lo positivo de esta situación.
Cada uno aporta lo que más sabe y ayuda al otro. Físicamente, emocionalmente y mentalmente. La sensación de que estando a dos multiplicamos, de que nos hace mejores.
Constantemente hay un intercambio y hay que ser conscientes de ello.
Tienes que negociar
Viajando en pareja no tomas tú solo las decisiones, es una cosa de los dos y es un constante.
Hay que establecer pactos y reglas donde los dos os sintáis a gusto. No pueden haber miradas de reproche ni aquello de «ya te lo dije».La decisión una vez tomada tiene que ser de los dos y la responsabilidad compartida.
Por eso te animo a que crees y apliques con tu pareja el código de camerino, un ejercicio para convertirse en un equipo de alto desempeño.
Un equipo multiplica
Lo bueno de estar en un equipo es que multiplica.
Los esfuerzos de los dos hacen las cosas más fáciles. Y si es no es así, entonces tienes que plantearte que está pasando.
Cocinar, comprar, reparar, preparar rutas, maniobras, hay múltiples tareas que hacer y poderlas dividir hace que sea todo más eficiente. Cada uno se ocupa en lo que es mejor o lo que le más le gusta.
La importancia del espacio vital viajando en pareja
Nos dimos cuenta en seguida de la importancia que tenía poder tener un espacio para cada uno. Un sitio propio. Aunque, complicado en un barco donde la vida en común la haces en el espacio que hay en común y además es pequeñito.
El espacio no es sólo una cuestión física
Algo que se pone de manifiesto y que aprendimos rápido es que el espacio vital no es una cuestión física. Es principalmente una cuestión de tiempo.
No estamos hacinados uno encima de otro y si estamos juntos compartiendo el mismo tiempo. Lo que necesitas entonces es tiempo para tus cosas, tus silencios o chatear por whats app con tus amigos. O como dicen Yeyo y Gabriela necesitas tiempo para vos y tienes que encontrarlo.
Y aquí volvemos al respeto mutuo. De poder hablar de las necesidades que uno tiene y de lo que espera del otro. De las emociones y de como expresarlas. No se trata de exigencias, si no de hablarlo, negociarlo y encontrar un punto en común.
Al vivir en condiciones complicadas de espacio e intimidad hay que dejar las cosas muy claras. Qué necesitas y cómo. El resultado es que tenemos muchos menos roces ahora en el barco de los que teníamos en tierra. Parece paradójico y no lo es.
Respetar el espacio del otro
No hay sitio, está claro, y nos vamos a pasar los próximos años enganchados uno al otro. Hay que hablar si o si, hay que comunicarse con respeto sin lugar a dudas. Y finalmente hay que establecer pactos de convivencia.
Es un ejercicio, el de hablar y conocerse profundamente, que se nos olvida cuando las circunstancias son fáciles y parecen que fluyen solas. Y eso es, muchas veces, una trampa.
Se hace necesario conocer al otro para reconocerlo y darle el espacio que le corresponde a tu lado. Pedir con claridad que necesitas y preguntar al otro. No se vale esperar que el otro lo adivine, o acaso le regalaste una bola mágica :).
Recuerda que las adivinanzas son siempre un juego peligroso en la pareja.
Sé claro a la hora de expresar lo que necesitas y lo que quieres. Con cariño, respeto y grandes dosis de empatía. Verás como las cosas cambian para mejorar.
El proyecto común
Ser conscientes de que significa tener un proyecto común y como nos une nos ha hecho mejorar nuestra relación de pareja.
Qué es un proyecto común
Seguramente habrás pensado que nuestro proyecto en común es navegar y estar viajando en pareja. Y aunque es así, la realidad es que va mucho más allá. Son muchas más cosas.
Hablamos mucho de que es tener un proyecto en común, que significa para cada uno. Donde nos dirigimos como personas únicas y como pareja. La responsabilidad que representa para cada uno y como la llevamos.
Un proyecto en común va mucho más allá que el simple «hacer», es lo que representa para cada uno. Igual para ti, el proyecto común es crear una familia, tener hijos, o vivir en el campo o estar viajando con tu pareja por el mundo.
La realidad es que todo ello sólo son los titulares, hay mucho más dentro de un proyecto en común que hay que consensuar, planificar y entender que significa para cada uno, para poder ir alineados y en la misma dirección. Nada se puede dar por supuesto.
Cuando el proyecto evoluciona
Además el proyecto va a evolucionar, seguro. Los hijos crecen, los viajes te transforman y en el campo a veces se construyen urbanizaciones, por poner un ejemplo.
Todo ello hace, que sea cual sea tu proyecto, continuamente tendrás que estar replanteándote cosas, evolucionarás y a la misma vez que lo haces tu, lo hará tu pareja y vuestro proyecto.
Hay que estar preparados para los cambios, transformaciones y evoluciones. Afrontarlos con comunicación sincera, honestidad y confianza.
Conclusiones
Viajando en pareja he expandido mi conocimiento, nos hemos conocido mejor y estamos teniendo experiencias muy bonitas. Te puedo asegurar que estar 24 horas con tu pareja te hace pasar a veces por situaciones complicadas, a veces tensas y a la misma vez muy enriquecedoras.
Para aprovechar todo aquello que te espera te aconsejo que hagas antes un buen trabajo de interiorización.
Conocerte bien, saber que barreras tienes y también tu pareja. Así conseguirás que el viaje sea más consciente, más lleno. Y si no quieres dar la vuelta al mundo no pasa nada. A veces los mejores viajes son los que nos llevan al pueblo de al lado 😉
Ayudo a personas que sienten bloqueos y frustraciones a realizar un cambio profundo de transformación para conseguir claridad y aumentar su autoconfianza. Comparto mis conocimientos y experiencias en mi blog Caminos en el Mar y me encantaría que te llevaras una guía de regalo, la comparto de forma gratuita para que empieces desde ya tu cambio transformador.
Gracias por leerme y estar aquí.
Te veo en los caminos
Adriana
Tu Coach en el Mar
Que bonita historia gracias por compartir tu historia y lo que aprendiste de ellos
saludos
Hola! Gracias a ti por el mensaje. La vida nos da maravillosos momentos de aprendizaje. Un abrazo