¿Te cuesta cuidar tu alimentación al viajar? A nosotros también! Y es que desde que vivimos viajando e incluso antes, cuando sólo nos íbamos por 15 días, viajar y comer sano no estaba dentro de nuestros planes o si quiera posibilidades.
Sabemos que esto no es bueno y que el tiempo o el dinero no deben ser la excusa para comer mal cuando estás de viaje porque todo se trata de cultivar los hábitos adecuados para cuidar tu alimentación al viajar.
Candela es experta en nutrición y alimentación saludable y en este post, como autora invitada, te enseñará (y a nosotros) cómo cambiar la relación con la comida y los viajes.
Así que si quieres mejorar tu estilo de vida este artículo es para vos. Adelante Candela!
Índice
¿Tú también has descuidado tu alimentación dando la vuelta al mundo?
¿Te encuentras en esa situación en la que estás disfrutando de un tiempo por otros países, descubriendo nuevas culturas y personas pero no sabes cómo cuidar tu alimentación mientras viajas?
Tranqui, es completamente normal.
Como bien nos muestran Gabriela y Yeyo día a día en su blog, viajar tiene muchísimos beneficios.
Sin embargo, muchas personas viven pensando que ver mundo sale por un precio elevado, pero si sabemos cómo hacerlo puede ser más económico de lo que pensamos.
De hecho, a mi parecer, en estos momentos la sociedad está viviendo un “despertar”. Yo soy de esas personas que piensa que si por ejemplo, quieres hacer algo con 25 años y no lo haces en ese momento, a los 40 (antes o después) te vuelve a aparecer eso que has estado reprimiendo y acabas haciéndolo.
Vivimos en una sociedad que vive rápido, no se cuida, con muchísimo estrés y negatividad. Cada vez es más difícil parar y disfrutar del aquí y ahora. Por eso te recomiendo que aprendas a valorar también el descanso y busques más tiempo para ti y tu salud.
Como la palabra salud es muy amplia, yo he decidido hablarte hoy de la relación que tiene con la alimentación.
Me parece interesante además dejarte unos consejos para que reflexiones acerca de cómo cuidar tu alimentación al viajar. Y pongas en práctica aquellos que realmente te sirvan.
¿Qué es la inteligencia alimentaria?
A diferencia de la inteligencia matemática, inteligencia en lecto-escritura, geografía, historia, etc., nadie nos enseña a comer desde que somos pequeños, por lo tanto no llegamos a desarrollar la inteligencia en temas de alimentación.
Nuestros padres lo hacen lo mejor que saben y aprendemos a comer como ellos creen que debemos hacerlo, pero ¿es aquello a lo que nos acostumbran la mejor manera de alimentarnos?
El problema es que vivimos en una sociedad en la que debería existir una cultura alimentaria, alguien que nos explicara realmente los alimentos que son beneficiosos para nuestros cuerpos y cómo combinarlos.
Pero al igual que nos enseñaron sobre:
- la cultura en el país en el que vivimos
- diferentes lenguas
- tocar un instrumento
- seguir un horario
- respetar a los demás…
debería existir este tipo de conocimiento, a lo que me gusta llamar “inteligencia alimentaria”.
Cada vez existen más casos de sobrepeso y obesidad en niños y adultos, y hoy por hoy este problema ya supera en número de muertes a las causadas por hambre en el mundo.
¿Fuerte, no?
Comer es una necesidad, pero comer inteligentemente es un arte #Viajar #ViajayComeSano Share on X¿Cómo llevar una alimentación equilibrada mientras viajas?
No es tarea sencilla, en realidad este tema se nos puede ir de las manos.
O incluso te alojas en algún lugar donde no hay cocina, por lo tanto no puedes hacer tus propios menús y tienes que comer fuera todas las comidas, sin llevar un control de los establecimientos que visitas y por tanto sin tener en cuenta las calorías que ingieres.
Normalmente cuando viajamos, nuestro nivel de actividad es elevado.
Sin tener en cuenta el deporte que mucha gente sigue haciendo mientras viaja, en teoría la media de pasos que deberíamos dar todos los días para mantenernos bien activos son unos 10.000.
¿Sabías que para mantenerte activo deberías caminar 10.000 pasos? Descubrí una guía para cuidar la alimentación al #Viajar #ViajayComeSano Share on XCuando viajamos es probable que los demos, ya que queremos aprovechar los días y visitar lugares que no conocemos, pero ¿es suficiente?, ¿podemos hacer algo más para colaborar con nuestra salud?
También creo que es importante aclarar que no es lo mismo tener el objetivo de adelgazar mientras viajas a un objetivo de mantenimiento y comer equilibrado.
Si lo que quieres es cuidar tu alimentación para no ganar peso y mantenerte tal y como estás mientras viajas, es bastante más sencillo que buscar la pérdida de peso (o mejor dicho, la pérdida de grasa corporal).
Para hablar de pérdida de grasa corporal, hay que tener en cuenta que debemos gastar más calorías de las que ingerimos, por lo que cuando estamos fuera de nuestra zona de confort, es complicado tener ese control (pero no imposible!).
Si por el contrario no buscas eso y prefieres aprender a comer fuera, disfrutando pero aprendiendo a cuidar tu alimentación al viajar, encontrando aquellos alimentos que te dan energía para continuar con tu viaje y además sin obsesionarte… estás en el sitio adecuado!
Creo que en todo este mundillo de la alimentación, lo más importante es tener una conciencia alimentaria. Y más adelante te explicaré por qué.
¿Por qué llevar una alimentación equilibrada?
¿Realmente sabes lo que es? Te hago esta pregunta porque yo misma tuve que hacérmela un día.
Generalmente tendemos a pensar que “comemos bien” (o eso queremos pensar), para estar tranquilos y calmar nuestra consciencia.
La palabra “equilibrada” puede dar pie a muchísimas interpretaciones. Por ejemplo, una persona que bebe una cerveza a mediodía y en la cena, y luego una copa de vino para comer puede pensar: “yo bebo con moderación”.
Sin embargo, una persona que no está acostumbrada a hacer eso y bebe un par de cervezas el sábado por la tarde, probablemente pensará lo mismo.
El equilibrio es un aspecto que depende de cómo se mire y cómo se interprete.
Por eso mismo, para aprender a ser más objetivos, creo que lo primero que debemos hacer es analizar desde fuera nuestro comportamiento alimentario.
¿Nos ponemos manos a la obra entonces, no?
Consejos para cuidar tu alimentación al viajar
1. Para cambiar tus hábitos primero tienes que analizarlos
Para ello te aconsejo que empieces un diario.
Una especie de hoja de ruta donde anotes cada comida que haces. De esta manera a lo largo de la semana, viendo el resumen, serás consciente realmente de lo que te alimentas.
Cuando hablamos de comer, me gusta verlo desde una perspectiva “nutritiva”. Comer es nutrir a tu organismo, es darle aquello que necesita para que funcione de la mejor manera posible.
Cuerpo solo hay uno, y precisamente es el motor que nos permite estar aquí en la tierra. Si encima en estos momentos estás viajando por el mundo o has decidido perder tus miedos y empezar a hacerlo, con el desgaste físico que eso puede suponer, o te cuidas o notarás mucho desgaste físico… (y mental)
2. Aprende a valorar tus necesidades diarias
Otro consejo que me parece interesante es aprender a conocer qué nos pide nuestro cuerpo.
Esto va a depender de varias cosas. Pero ya te adelanto que tu cuerpo no necesita lo mismo a nivel nutricional un día que vayas a hacer una actividad física elevada a un día un pelín más sedentario.
Ojo! Debemos aprender a disfrutar por igual. Simplemente te aconsejo que encuentres tu equilibrio precisamente en este punto.
Cada persona tiene unas necesidades individuales, dependiendo de su edad, del nivel de estrés que tiene en su día a día, de las horas de descanso, su actividad física, entre otros aspectos.
En la literatura científica nos han enseñado mediante diferentes técnicas a calcular nuestro IMC (Índice de Masa Muscular), el peso ideal, etc., para conocer cuántas calorías consumir.
Y me parece interesante, pero sólo como aproximación.
Te hablo de que los días que vayan ser más intensos a nivel de actividad ingieras más hidratos de carbono y proteínas y los días que menos te muevas busques más grasa saludable y proteína de calidad (ya sea vegetal o animal).
No obstante (se que puedo parecer una pesada), como te digo, esto es una aproximación general, cada uno tiene sus necesidades, por lo que si realmente quieres profundizar en el tema busques ayuda de un profesional.
Pero sobre todo, no pienses que en esto de la alimentación hay fórmulas exactas (así como tampoco hay recetas mágicas para tener un cuerpo 10)!
No necesitas comer menos sólo necesitas comer BIEN #Viajes #VivirViajando #ViajayComeSano Share on X3. Disfruta de la comida local
En todos los lugares del mundo podemos encontrar “comida típica”. Yo soy de las que vota por probar aquellas cosas que son originarias del país en el que nos encontramos.
De esta manera conocemos sabores y texturas nuevas y de paso nos metemos más en la cultura en la que estamos.
Por desgracia hay muchos lugares en los que la comida local es bastante grasa, o poco interesante a nivel nutricional. Aun así, si lo vas a hacer de manera puntual, como forma de aprovechar al máximo tu experiencia por allí, hazlo!
Ojo con la comida típica de algunos países donde se compra en puestos ambulantes por la calle. En muchas ocasiones la higiene es pobre y si no estás acostumbrado a eso, puede sentarte mal.
4. Intenta comprar en mercados y supermercados fiables
Personalmente, los mercados me chiflan. Esa mezcla de colores, olores… creo que tiene muchísimo encanto. Me gusta mucho perderme viendo puestos diferentes y creo que tienen una esencia especial.
Además, normalmente los mercados están repletos de alimentos locales de temporada, por lo que (aunque no siempre es así), te puede salir más económico.
En cuanto a la compra en supermercados, te aconsejo que aprendas a leer las etiquetas de productos.
La industria muchas veces nos la cuela bien, anunciando un producto como saludable, o “bajo en grasa”, “libre de azúcares añadidos”. Y realmente encuentran la manera de hacerlo más apetecible colándonosla con otros ingredientes perjudiciales.
¿Para qué? Pues precisamente para que lo consumamos más. Por eso, si sabes hacer una buena lectura de los ingredientes (aunque al principio es más pesado) luego eres una fiera encontrando las mejores opciones del supermercado, y vas como una bala llenando el carro.
5. Busca las mejores opciones de restaurantes
Gracias a páginas como ésta podemos encontrar diferentes sitios alrededor del mundo. Restaurantes de comida vegetariana, vegana, “healthy”…
Siempre existen opciones de comida saludable, sólo tenemos que saber buscar, o incluso preguntar a la gente local, seguro que pueden recomendarnos opciones muy interesantes.
En este caso, seguramente podremos encontrar un montón de platos apetecibles y equilibrados.
Esta opción quizás no es la primera en tu lista si estás viajando por el mundo, por ser una de las opciones que probablemente te cueste más dinero.
Pero si de vez en cuando te permites comer en algún restaurante y cuidar tu alimentación al viajar, este es mi consejo 😉
6. Elige un alojamiento con cocina equipada
Uno de los consejos que mejor puedo darte en este artículo es este.
El hecho de que puedas cocinarte tu propia comida es lo mejor. Estés en China, en Guatemala o en Alaska.
Cuando tú cocinas, tú decides.
Dependerá de la calidad de los alimentos que compres pero la manera de cocinarlos también importa (y mucho). Te recomiendo que uses sobre todo el horno, al vapor y cocines con poquito aceite (si es que dispones de él).
Para ello, compra unos tupperwares (si son de cristal mejor que de plástico, aunque pesan más). Y planifícate las comidas semanales para encontrar un hueco y poder cocinar.
Para viajar y comer sano es importante planificarte las comidas semanales y mejor aún cocinarte vos #Viajar #VivirViajando Share on XSiempre puedes congelar, aprovecha para hacer mucha cantidad y busca recetas fáciles y saludables (hay muchísimas).
7. Come muchas frutas y vegetales
Soy una fiel defensora de la fruta y la verdura. Y aunque siempre nos dicen que debemos tomar 5 raciones de fruta y verdura al día, vuelvo a insistir en que esto son recomendaciones generales y cada uno tiene sus necesidades personales.
Sin embargo, la fruta siempre es una buena opción como snack o como postre (en realidad es buena opción cuando te apetezca o sientas hambre).
Puedes elegir la fruta fresca o la fruta deshidratada, aunque yo prefiero la fresca. Pero bien es cierto que la deshidratada se conserva mejor.
Puedes llevar bolsitas con cierre específico para que no se te desparrame por toda la mochila y así echar mano de ellas cuando sientas algo de apetito.
Aunque existen muchos mitos acerca de que la fruta engorda, yo consumo varias piezas al día porque hace tiempo que desmonté por mi misma esta falsa creencia.
La fruta nos aporta azúcares simples (pero muy muy beneficiosos). Nos dan energía al poquito tiempo de haberlas consumido y además son una bomba de vitaminas, fibra, minerales… súper necesarios para el buen funcionamiento de nuestro organismo.
Si estás viajando por el mundo encontrarás miles de frutas diferentes que seguro que nunca has probado. O incluso redescubrirás el sabor de algunas.
El mejor coco que probé fue en República Dominicana, recién cogido por un chico de allí! Qué delicia…
Eso sí, mejor consúmelas quitándoles la piel o asegurándote que están lavadas con agua potable.
8. Bebe mucha agua
Este es un consejo en general, pero más cuando estás visitando diferentes lugares, porque en realidad sin darte cuenta estás haciendo muchos kilómetros al día.
El agua, además de saciar la sed, debemos consumirla poco a poco a lo largo del día. Aunque no sintamos la necesidad.
Cuando nos movemos, nuestro cuerpo regula su temperatura mediante el sudor. Por eso liberamos esta sustancia y permitimos eliminar además toxinas.
Con el agua lo que hacemos es rehidratarnos, permitir que haya un balance equilibrado de líquido necesario en nuestro organismo.
Lo ideal es llevar con nosotros siempre una botella que podamos ir rellenando (yo suelo utilizar una de dos litros, así sé cuando he bebido esa cantidad exacta).
Asegúrate de que el agua que bebes es potable e intenta evitar el hielo de los restaurantes o de bares de la calle. Las aguas no son las mismas y nuestro estómago no está acostumbrado. Por lo que puede sentarnos mal y necesitar un médico y varios días de reposo.
9. Ojo con las ensaladas
Lo mismo pasa cuando lavan las verduras frescas para las ensaladas. No estamos acostumbrados a otro tipo de aguas, así que quizás al principio a nuestro estómago le cueste mucho procesarla.
Te aconsejo que no consumas muchas ensaladas a no ser que las hagas tú mismo en casa y sepas que el agua que utilizas está bien.
Además, en muchos puestos de la calle o incluso en restaurantes, las verduras entran en contacto con insectos…
10. Deja de lado la comida basura
La comida basura o la “fast food” tiene una cosa a su favor: es accesible allí donde viajes.
Raro será encontrar un país lleno de sitios de comida saludable, pero la comida rápida… llega a cualquier rincón del mundo.
¿Otro punto a favor? Es demasiado barata.
Y precisamente es tan barata porque su calidad deja mucho que desear…
Cuidado con caer en la trampa de comer comida basura varias veces a la semana para que el mes sea más barato (te saldrá caro a nivel de salud).
Además, es adictiva. En el momento en el que dejas de consumirla y te acostumbras a que no forme parte de tu alimentación, luego pasas por la puerta de un restaurante así y no te dan ganas de entrar… te lo aseguro.
No me considero una persona extremista con el tema de la alimentación. A mí también me gusta comerme una buena hamburguesa y una pizza o un buen helado… Pero tengo en cuenta que eso es un capricho y lo consumo con moderación.
Por eso, creo que es interesante basar tu dieta en otros alimentos más nutritivos y dejar de lado la comida basura.
Conclusiones para cuidar tu alimentación al viajar
Para acabar, me gustaría recordarte que siempre hay opciones cuando realmente tu objetivo es aprender a cuidar tu alimentación al viajar y llevar una alimentación equilibrada.
Puede hacerse más complicado pero desde luego es posible.
¡Querer es poder! Y aunque muchas veces esto no depende 100% de nosotros (porque quizás en el lugar en el que te encuentras no hay tantos productos saludables), siempre podemos encontrar buenas opciones.
Aprende a tener una conciencia alimentaria. Elige los productos que mejor te vengan a ti. Aprende a escuchar a tu cuerpo y conocer sus necesidades, porque no tendrán nada que ver con las necesidades del cuerpo de otras personas.
Si tienes cualquier duda yo estaré encantada de ayudarte. Para mí es un placer contestar las preguntas que tengas y echarte una mano mientras recorres diferentes países.
Por último, recordarte que cuidar tu alimentación contribuirá a que tu salud mejore, a que tengas niveles de energía adecuados para rendir mientras viajas y a que disfrutes probando comidas típicas.
No te olvides de disfrutar de ese proceso, hay una línea muy delgada entre cuidar tu alimentación al viajar y obsesionarse.
Hasta aquí mi aporte, espero que estos 10 consejos para que cuides tu alimentación mientras viajas te ayuden.
Por supuesto, me encantaría conocer tu opinión, así que te espero en los comentarios…
Maria dice
Muy interesante el post!! Me ha encantado lo pondré en uso cuando se pueda viajar!! Gracias!! 🙂
Gabriela & Yeyo Caminito Amor dice
Hola Maria! Muchas gracias por tu comentario, nos alegra que te haya gustado y sido útil y ojalá cuando podamos volver a viajar lo pongas en práctica. Un abrazo!